Injerto de castaño que comienza a mostrar su brotes |
Injertos de manzao |
Así en el cerezo, la especie que
más trabajamos en el proyecto, podemos estimar que aproximadamente un 60 por
ciento de los injertos se va a lograr a pesar de la presencia del pulgón en los
mismos, que evidentemente va a dañar alguno de los que actualmente se
encuentran logrados. Cifras que se acercarán a los resultados de las ediciones
anteriores.
En el ciruelo, se aprecia una
sustancial mejora en el éxito con respecto al ejercicio pasado, en el cual solo
se había conseguido un escaso 14 %. Estimamos que en esta edición se ronde el
40 % de éxito, cuestión que de lograrse supone una importante mejora. La mejor
calidad de los plantones y de los injertos, así como una más prematura acción
del injertado, sin duda están jugando a favor de esta cuestión
En las diferentes variedades de
perales, se aprecia un alto grado de logro en los injertos que nos hacen
suponer un aumento de las cifras de 2011, en el que se lograron valores en
torno al 40 %. No apreciamos por el momento, sustanciales diferencias entre
variedades ni en el uso de los dos patrones (espino albar y espino negro),
aunque en fechas posteriores podremos ofrecer resultados más concretos. Se ha
mejorado notablemente la calidad de los plantones y de los injertos especialmente
en las variedades con más número (Donguindo,
pera d´agua o inverniega)
Los perales sobre espino albar muestran gran vigor |
Los ciruelos comienzan su desarrollo |
Por último en el castaño, también
es pronto para ofrecer una estimación aunque viendo los brotes de las
diferentes variedades injertadas en la finca, esperamos superar el escaso 10 %
del año 2011. En estos días comenzamos a observar el nacimiento de las hojas en
varios de ellos.
La mariquita ataca a los pulgones del cerezo |
Lo que si hemos detectado, ha
sido el fallo de varios injertos como consecuencia de una mala adherencia de la
cinta aislante usada para sellar los injertos. Bien por defecto de fábrica o
bien como consecuencia de las altas temperaturas de la época de injertado, la
cinta se ha desprendido del esqueje y se ha malogrado el injerto. Una incidencia
que realmente no contábamos con ella.
La anormal primavera que hemos
padecido este año, con escasas precipitaciones y altas temperaturas en Febrero
y la primera quincena de Marzo y un brusco descenso y altas cotas de
precipitación a partir de esa fecha, han propiciado unas malas condiciones para
el injertado. El viejo refrán de la zona que reza “años bisiestos, ni cordeiros ni insiertos” (años bisiestos ni
corderos ni injertos) puede ilustrar esta situación. No obstante, si a partir
de ahora todo trascurre con normalidad, podemos hablar de una previsión de
2.500 frutales para repartir entre los vecinos del municipio que deseen
recuperar estas variedades en sus propiedades.
En la próxima entrada en este
blog, ya podremos aportar datos más concretos de la evolución de los frutales de
este proyecto